Lema

TOTS FEM ESCOLA

domingo, 30 de noviembre de 2008

La importancia de jugar


Nos acercamos a las fechas que mayor importancia tienen en el imaginario infantil, la Navidad. Hasta los más pequeños asimilan rápidamente los rituales asociados a estas fiestas: más tiempo en familia (en casa y, sobre todo, fuera de casa), menos tiempo en el colegio, la ornamentación en las calles y, ante todo, juguetes, muchos juguetes. Es un periodo de gran felicidad para los niños, y también una de las épocas del año más agradables para los padres, que pueden disfrutar de la compañía de los pequeños compartiendo su alegría e ilusión.

Elegir los juguetes de vuestros hijos no es, o no debiera ser, una actividad trivial, especialmente en días tan señalados como los que vienen. Los niños esperan con ansiedad e incertidumbre el fruto de su buen comportamiento durante todo el año, y a ningún padre gusta decepcionarles. Es una decisión más importante de lo que puede parecer: no en vano, en los primeros años de vida, la principal actividad del niño, a la que dedica más tiempo, energías e ilusión, es el juego.

Decálogo del buen juguete

Psicólogos y pedagogos señalan que "las capacidades intelectuales, psíquicas, emocionales y motoras del niño/a se desarrollan de forma más eficaz a través del juego y de los instrumentos necesarios para ponerlo en práctica, es decir, los juguetes". Por su parte, Jean Château, uno de los mejores analistas del juego infantil, resume esta idea en una única pero esclarecedora frase: "Un niño que no sabe jugar es un pequeño viejo y será un adulto que no sabrá pensar". Interesante.

Al elegir un juego o juguete para vuestros hijos, pues, cabe tener en cuenta una serie de recomendaciones:


- que se adecue a los gustos y preferencias del niño, y al mismo tiempo, que sea reconocible para él -es decir, que esté cercano a su universo particular-


- que se adapte a la personalidad del niño, a su edad y a las habilidades que, padres y educadores consideren que el niño necesita potenciar (esto implica conocer al niño y dedicar tiempo a jugar con él, saber qué le motiva y qué le aburre)


- que sea un juguete seguro e inocuo (no nocivo). Para ello, se recomienda que el juego o juguete incorpore la marca CE en el envase (lo que indica que está fabricado en la Unión Europea y cumple la normativa de seguridad)


- que contenga las instrucciones de uso en español y, en el mejor de los casos, una explicación de los valores psicopedagógicos del juego.


- que sea posible utilizarlo para jugar con los amigos, o en su defecto inculcar al niño los valores de compartir sus juguetes


- que estimule la creatividad del niño o cualquier otra capacidad específica que se desee fomentar (que el niño se convierta en protagonista del juego)


- que sea sólido y duradero o, en cualquier caso, que caiga en desuso por iniciativa propia del niño y no por degradación. Es importante enseñar a los niños a cuidar de sus juguetes, a recogerlos y a guardarlos en su sitio una vez finalizado el tiempo de recreo.


- que no sea excluyente por su género. Los juguetes son asexuales e igualmente recomendables para niños y niñas: no es bueno discriminar en el momento de elegirlos. Un muñeco de peluche puede ser un excelente regalo para un niño, del mismo modo que una pelota de fútbol para una niña.


- que motive al niño por su diseño, forma o color


- que no suponga un desembolso excesivo, ni aunque el niño lo pida con insistencia. El mejor juguete no tiene por qué ser el más caro

Y ahora a pensar qué regalar estas Navidades. Únicamente quería añadir de mi cosecha personal que no creo que sea ni educativo ni saludable económicamente, que los niños reciban un exceso de juguetes en estos días. Deben conocer que hay que compartir, conformarse y valorar lo que poseen. Pensar que muchas veces juegan más con el envoltorio que con el juguete en sí.


¡Felices Fiestas a todos los papás del Nº 10!
Articulo aportado por Susana M.L. (Professora Inf 4 anys Valencià)

No hay comentarios: